Las andanzas de un lobo estepario extremeño.

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"Viajar en bici es hacer más grande el Mundo. Es aprender lo esencial de la vida. Es vivir el presente sobre todas las cosas. El placer del cicloturismo está mucho más en el camino que en el destino, son los medios los que justifican el fin. Durante días, semanas o meses, no necesitas más que lo que llevas a cuestas
" (del artículo: "Con la casa a cuestas", revista: Bike Rutas, Nº 4, 1999)

20 mar 2021

Senderismo Extremadura: Fuentes de León - Castillo del Cuerno - Cuevas - Fuentes de León (Badajoz)

Un par de días antes de acercarme al entorno de las cuevas de Fuentes de León (Monumento Natural de Extremadura) y una vez que tuve la seguridad que iba a tener libre ese sábado, llamé a la oficina de información y turismo para  concertar cita para visitar las cuevas, pero con tan poco tiempo de antelación,  siendo sábado el día que quería visitarlas y supongo que con el tema del COVID las visitas son con un menor número de personas... pues la respuesta fue que estaba todo al completo, tanto para la mañana como para la tarde, aunque para el día siguiente si había un hueco para una persona pero yo sólo disponía del sábado como día libre.

Tocó un cambio de planes, en lugar de visitar las cuevas y hacer una ruta senderista circular cortita, de poco más de 6 km, con inicio y fin en la zona de las cuevas e incluyendo la visita al castillo del Cuerno y tener tiempo para hacer fotos de orquídeas por los alrededores de la cuevas, realizaría una ruta más larga, circular con inicio y fin en Fuentes de León, pasando por el castillo y por la zona de las cuevas, aunque no pudiera visitarlas, pero intentando evitar la bajada por camino de hormigón desde el castillo a las cuevas y sobre todo evitar la vuelta por asfalto, por carretera, desde las cuevas hasta Fuentes de León, al menos esa era la idea porque la realidad sería otra...

Dejé el coche a la salida del pueblo, en la misma calle  desde donde parte el camino que va hacia el Castillo del Cuerno, comenzando a caminar más tarde de lo que tenía previsto, algo que me suele pasar cuando no quedo con nadie, porque como no tengo prisas me acabo relajando...

La ruta se puede dividir en dos partes: la primera, desde Fuentes de León al castillo, que en principio no iba a tener ninguna dificultad de orientación, simplemente seguir el camino; y la segunda, tal y como quería intentarlo, o sea, bajando desde el castillo a la zona de las cuevas sin seguir el camino de hormigón y el regreso  desde éstas al pueblo por camino sin utilizar la carretera, podría ser más complicado porque tendría que ir por tramos de campo a través...

Inicio el recorrido en una mañana con mucho viento y los primeros seis kilómetros, hasta la subida final al castillo, son un paseo muy cómodo y llevadero. Una vez dejo atrás la zona de olivos en las proximidades del pueblo, el resto del recorrido transcurre por un magnífico paisaje de dehesa y bosque meditérraneo muy bien conservado, pero gran parte de este tramo es por camino de hormigón, flanqueado casi siempre por paredes de piedra.

Un paseo tranquilo, donde el hormigón acaba dejando paso a un camino amplio que más tarde se estrecha, entre  encinares  y sierras que conservan su esencia, pasando por alguna explotación porcina junto al camino y cruzando un par de riveras por  pequeños puentes y justo al dejar atrás el último de ellos, se inicia al hacer un giro a la izquierda la subida al castillo.

La subida es un tramo de aproximadamente kilómetro y medio, donde el camino cómodo deja de serlo y se estrecha más, siempre entre paredes de piedra, con el firme que se vuelve muy irregular, al tiempo que la subida se va acentuando cada vez más, pero para  mi gusto es de agradecer después del último tramo tan placentero.



Vista de la torre del Castillo del Cuerno desde el camino y puede apreciarse la subida que quedaba pendiente.

En la última parte se pasa junto a la "fuente de los caballos", a la izquierda del camino de subida, mientras a la derecha las vacas pacen en total tranquilidad, tan solo algunas de ellas levantan la cabeza y me miran subir por el camino como diciendo ¿dónde irá éste?...

Tras pasar la fuente el entorno se vuelve más frondoso, mucha más vegetación que invade parte del camino de subida dejando solo una bonita senda.

En la última parte de la subida a la izquierda aparece una zona más abierta, salpicada de canchales, pasando los cuales aparece una bifurcación. El camino de tierra sigue recto, mientras a la derecha parte el camino de hormigón que baja hasta la zona de las cuevas y éste es el que tengo que coger, porque en apenas unos  metros aparece a la derecha la cancela por la que se accede al breve y bonito tramo, de unos 500 metros, que lleva al castillo, cuya torre se divisa perfectamente frente a mi, teniendo además muy buenas panorámicas a la izquierda.


Más que un castillo, son las ruinas de un castillo del que apenas se mantiene en pie la torre por la que se accedería a su interior; sus muros están derruidos, por lo que este punto se convierte en un improvisado mirador desde donde se pueden tener unas vastas panorámicas hacia cualquiera de los puntos cardinales, el problema es que en este  punto el viento arrecia mucho más y se convierte en desagradable, así que no es cuestión de estar mucho tiempo allí parado.




El interior del recinto principal del castillo es de forma cuadrangular, con un estanque en el centro y habitáculos por los laterales, incluido los restos de un aljibe.



Vistas desde e lnterior del recinto del Castillo del Cuerno. En la foto inferior, en el centro con estructura  cuadrada estaría el estanque;  en la parte superior, justo por encima de uno de las véertices del estanque, se encuentra el aljibe, y a la derecha de éste otras estancias o habitaciones.

Salgo del recito principal y doy un vuelta por los alrededores, entre éste y un segundo recinto más exterior y me entretengo intentando ir a la caza de mariposas para fotografiarlas, principalmente algunas Vanesa atalanta de buen tamaño, pero entre el viento que hacía y lo activas que estaban fue  imposible fotografiarlas así que desisto después de un buen rato. No consigo ver tampoco ningún tipo de orquídeas por más empeño que pongo en su búsqueda.

Plano del recinto interior del Castillo del Cuerno.

Después de casi una hora merodeando por los alrededores del castillo y tomar un pequeño piscolabis parapetado entre sus derruidos muros para protegerme del viento, decido intentar buscar alguna senda que baje hasta la zona donde se encuentra el centro de interpretación y las cuevas, que pueden verse desde arriba de la sierra, pero después de unos veinte minutos buscando algún indicio de senda  o camino que salga desde el recinto más externo de la zona del castillo, no veo nada, por lo que supongo que habría que ir en un principio por algún tramo de campo a través antes de dar con ella, pero como ya había perdido bastante tiempo, me decido ir por lo seguro, regresar por el mismo camino hasta enlazar de nuevo con el camino de hormigón y descender por él.

Es un tramo  de kilómetro y medio aproximadamente de bajada pronunciada, con las vistas siempre del castillo a la derecha, sobre la sierra. A la derecha del camino hormigonado me encuentro con algunas peonías, pero solo veo una flor abierta, todo lo demás está sin abrir y aún les quedará al menos una semana... y de nuevo sin rastro de orquídeas o al menos yo nos las veo.


Tras kilómetro y medio aproximadamente, llego a una estrecha carretera que cojo a la derecha, en dirección al centro de interpretación, pero antes de llegar a él tomo un desvío por camino a la izquierda, siguiendo las indicaciones hacia la Cueva del Agua, que está un poco más alejada del grupo de cuevas que se encuentran junto al centro de interpretación, de esta forma evito seguir por asfalto, además de poder visitar el entorno donde se encuentran estas otras cuevas.

Al llegar al arroyo Montemayor me encuentro una bifurcación, a la derecha hacia el centro de interpretación que está a menos de un kilómetro, y a la izquierda están las otras dos cuevas y la sima. Giro hacia la izquierda para ver los accesos  a la Cueva del Agua (está cerrada y solo se puede visitar con cita previa y en algunas épocas del año, para no molestar a la colonia de murciélagos que habitan en su interior), la Cueva la Lamparilla (esta creo que no es visitable) y a poca distancia de ésta última y subiendo unos escalones, la entrada a una sima, totalmente vallada y cerrada y en donde en sus alrededores junto a la senda, en zona sombreada, me encuentro con varias Ophrys tentrendinifera, aunque éstas a pesar de que me gustan mucho, son mas bien comunes por mi zona y son otros tipos de orquídeas abejeras las que me hubiera gustado encontrar.

Junto a la entrada de la Cueva del Agua sale una senda que en subida y en pocos metros, lleva a un observatorio de madera, en teoría es un observatorio para ver los murciélagos, pero yo no vi nada, así que no me entretuve mucho allí.

El lugar es muy tranquilo, frondoso, con mucha vegetación y sombra y aunque podría ser un buen sitio para parar a comer prefiero retroceder hasta el arroyo y seguir paralelo a éste hasta el centro de interpretación, viendo algunos tramos entre el camino y el arroyo cubierto completamente de flores, a modo de pequeñas praderitas, zonas que pueden ser ideales para mariposas, pero por más que me entretengo en buscarlas apenas llego a ver alguna Pieris y poco más...

Llego a la zona donde se encuentra el centro de interpretación que como es lógico por la hora que era estaba cerrado, de todas formas ya sabía que no podía visitar las cuevas porque los grupos para hoy estaban todos cubiertos, tanto para la mañana como para la tarde, así que tras pedir una cerveza en el bar me siento en una de las mesas del merendero, con una excelente temperatura, para dar buen cuenta del bocata que llevaba.

La verdad es que en ese momento me encontraba algo desanimado, porque  si bien hasta llegar al castillo del Cuerno fue todo bien (siendo para para mi lo mejor la subida y el entorno del ruinoso castillo ya que el tramo inicial de la ruta también fue por camino de hormigón), después perdí mucho tiempo buscando  una forma de bajar hacia las cuevas que no fuera por el insulso camino hormigonado por el que finalmente tuve que bajar; pero es que además y tal y como estaba el campo de espectacular y florido, con una buena temperatura aunque con una mañana muy ventosa al menos hasta el mediodía, tenía esperanzas de poder fotografiar orquídeas o mariposas, pero a éstas últimas apenas las vi, salvo algunas comunes como: Pieris, o Maniola jurtina o alguna Vanesa atalanta y en cuanto a las orquídeas que era principalmente a lo que había venido ya que no podía visitar las cuevas, pues poca cosa. Otro tema que podría prometer como es el “pajareo” pues poca cosa también, al margen de escuchar su trino al principio de la ruta en la zona de la dehesa, pero poco más.... así que me estaba comiendo el bocata con desgana porque después del largo desplazamiento que había hecho, la ruta me estaba sabiendo a poco.

Al terminar de comer voy a ver unos paneles informativos que se encuentra al comienzo de una senda que en un recorrido circular de apenas un kilómetro pasa por los accesos a las cuevas, además de ser un “jardín pétreo o geológico” porque junto a la senda se encuentran “plantadas” diferentes tipos de rocas, junto a una pequeña placa informativa en cada una de ellas. En los paneles también se comenta que en los accesos a las cuevas y junto a la senda se pueden ver orquídeas, así que como el recorrido circular es corto, me dispongo a hacerlo.

Junto al centro de interpretación se encuentran tres de las cuevas este entorno con fáciles accesos para visitarlas: Cueva de los Postes, Cueva de Caballo y Cueva Masero.

En este corto recorrido tan solo me encuentro dos tipos de orquídeas, la Orchis itálica y de nuevo la Ophrys tentrendinifera, pero nada más, ni siquiera en la zona de la era, el punto más elevado del recorrido, donde se encuentra un “mirador celeste”, con una gran mesa que se activa/ilumina por la noche y donde aparece el mapa celeste que se puede ver desde ese punto en cualquier momento del año, ayudando a la interpretación del firmamento, sobre todo para los no iniciados en esta materia.

Terminado este breve y entretenido recorrido pero en el que sigo sin encontrar nada de lo que esperaba, me siento en la terraza del bar para tomar un café y decidir qué hacer, si seguir directo por la carretera hasta Fuentes de León, lo que pueden ser 5 ó 6 km por asfalto o intentar dar con el “camino de los Cuellos” que es lo que inicialmente tenía pensado, pero el problema es que hasta dar con él no hay señalizaciones y posiblemente tuviera que ir algún tramo campo a través, con lo que  podría perder tiempo igual que me pasó en el castillo buscando alguna senda de bajada hacia las cuevas y se me podría hacer tarde, más cuando aún no habían cambiado la hora, además de no saber con certeza si ese camino transita por finca privada.

Estaba bastante desanimado como he comentado, así que no me compliqué y decidí ir a lo seguro para llegar a casa a una hora prudencial, pero eso supuso andar seis kilómetros por asfalto hasta llegar donde tenía aparcado el coche, lo que sin duda alguna fue lo más monótono y aburrido del día.

En fin, que unas veces se gana y otras se pierde, hay veces que sin buscarlo ni esperarlo te llevas sorpresas y otras veces como hoy en la que regresas totalmente desanimado, no solo porque no haya visto nada especial en cuanto a flora, orquídeas, mariposas, reptiles o pájaros, sino porque gran parte del recorrido ha sido por caminos con firme de hormigón o por asfalto. De lo realizado hoy, sólo me quedo con la primera parte del recorrido, hasta el castillo del Cuerno y eso que la parte inicial también es de camino hormigonado, pero es un recorrido que pasa por zonas más cerradas de dehesa en un bosque mediterráneo muy bien conservado y por supuesto lo mejor y lo que a su vez es lo único que ha requerido un poco de esfuerzo físico, es la subida al castillo, tras pasar los dos pequeños puentes sobre sendos arroyos.

En fin, uno de esos días en que no sale nada, así que quizás el próximo año por estas mismas fechas, una vez que se me pase la frustración, vuelva a intentar realizar el recorrido que tenía planteado, el circular sin regresar por la carretera y sin bajar desde el castillo por el camino de hormigón, aunque para ello no puedo empezar la ruta tan tarde como hoy....

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