El enclave del “Peñón de Cogolludo” se situa a orillas del embalse de Orellana, en el margen derecho del río Guadiana, entre los términos municipales de Navalvillar de Pela y Puebla de Alcocer. Su altura de 434 metros y su excelente situación, controlando una zona donde se produce un estrangulamiento del embalse, le dotan de una posición privilegiada para el control del vado, de ahí que haya sido ocupado sucesivamente desde época preromana, más aún si tenemos encuenta que este estrechamiento natural sobre el embalse de Orellana es el único paso actual del embalse y del Guadiana desde su arranque por debajo del embalse de García de Sola hasta su presa ya cerca de Orellana La Vieja.
El antiguo asentamiento preromano fue reutilizado posteriormente en época romana, ya que en este promontorio se encuentran los restos de la antigua ciudad romana de Lacimurga (podéis leer algo más de información sobre el yacimiento arqueológico de Lacimurga en ESTA ENTRADA de este mismo blog).
Como he comentado antes, los romanos decidieron reutilizar este antiguo asentamiento porque no eran ajenos al gran valor estratégico que tenía, controlando algunos vados sobre el río Guadiana, ya que era una importante zona de tránsito, un paso natural entre la Bética y la Lusitania o un paso en busca de la zona minera de Almadén y Sierra Morena, un lugar de paso hacia la cercana Miróbriga (Capilla)...
Y la histora se repite, y así, mucho tiempo después, esta zona, este "Peñón de Cogolludo", vuelve a ser reutilizado durante la Guerra Civil debido a su emplazamiento y al gran valor estratégico que posee, al igual que pasó con otros restos históricos que por el enclave en el que se encontraban volvieron a ser reutilizados en Extramadura durante esta guerra (como es el caso de algunas posiciones del frente en la Sierra del Argallén ya comentadas en este blog).
Estructuras en la parte alta del peñón, por encima del túnel, las más cercanas al acantilado que se desploma hasta el embalse. Posiblemente hubiera un puesto de observación en esta zona, el enclave es ideal y desde la parte alta se tendría una panorámica en 360 grados.
De la importancia estratégica del lugar da fe lo fuertemente protegido que se encontraba el peñón por el ejército franquista (por soldados pertenecientes a la 19 División), ya que aún hoy podemos encontrarnos con trincheras que lo recorren a modo de anillo o cinturón defensivo (cuando estuve visitándolas solo pude recorrer el trazado noreste), por no hablar de los muchísmos pozos de tirador y nidos de ametralladora que pude encontrarme en el recorrido.
La verdad es que es una pasada ver toda esta red de trincheras salpicadas de pozos de tirador, así como el enclave en el que se encuentran aunque la pena es ver que con el paso de los años la naturaleza se ha ido adueñado de todo el entorno, incluso en ocasiones uno tiene la sensación de estar dentro de una selva por la cantidad de arboleda, vegetación y arbustos que impiden tener una visión de lo que habría en frente, o sea, la línea enemiga; tan solo en los huecos que deja la vegetación y la arboleda se divisa el pantano (aunque en aquella época solo estaría el cauce del río, ya que el pantano se hizo mucho más tade) y la otra orilla, donde se asentaría la línea republicana (¿la 109 Brigada Mixta?), en clara inferioridad tanto a nivel estratégico como defensivo.
En tantos metros de trincheras podemos encontrarnos de todo un poco: zonas muy colmatadas, zonas de metro o metro y medio de profundidad donde hay tramos que se pueden recorrer y otros donde los árboles, arbustos y maleza crecen desde el interior o desde los laterales de las tricheras o desde los alrededores, dificultando no solo su recorrido sino también las vistas.... en otras ocasiones también hay parapetos de piedra sobre las trincheras que aún se mantienen en pie, dotándolas de más empaque; hay zonas excavadas en tierra y otras sobre la propia roca, así como tramos de gran envergadura, tanto en profundidad como en anchura.
Recorrer actualemente este cinturón defensivo, estas trinchera, es estar inmerso en la naturaleza... sin ruidos externos, porque las personas que hay en la zona, pescadores sobre todo, están en la parte baja, en la orilla del pantano. El silencio y la tranquilidad solo se rompe por el canto de los párajos o por el viento fresco que mueve las hojas y ramas de los árboles, viento frío que arrastra humedad y algunas gotas de lluvia que por suerte para mi en ese día, solo se quedaron en eso...
Según la web de "Recuperación del patrimonio bélico reciente en el Frente Extremeño", la trinchera que rodea el peñón "estaba muy bien defendida, sobre todo en el tramo NE, donde se han detectado 15 nidos de ametralladora y 14 pozos de tirador. Los nidos de ametralladora son simples, excavados en el terreno, sólo dos de ellos están construidos con mampuesto en seco. Los pozos de tirador presentan diferentes tipologías, de tendencia circular, en gancho y con obra de mampuesto. A lo largo de la trinchera se integran almacenes y dos grandes refugios excavados en el nivel geológico, uno de ellos bien conservado. La gran cantidad de refugios con los que cuenta fortificación pone de manifiesto la magnitud del destacamento, en realidad se distinguen tres áreas, siendo la que se encuentra en la zona NW la de mayor entidad. Los refugios presentan estructuras tanto de planta circular como rectangular, construidas con mampuesto en seco o ligado con barro que conservan alzados de hasta 1,80 metros".
Puedes ver las fotos que aparecen en esta entrada del blog y alguna más, con mayor tamaño y resolución, en ESTE ENLACE.
Os dejo a continuación un pequeño vídeo de algunos tramos de trincheras con nidos de ametralladora y pozos de tirador, solo del del sector noreste del cerro.
FUENTES CONSULTADAS:
- Web por la "Recuperación del patrimonio bélico reciente en el Frente Extremeño".
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