Que sí, que sí... ¡una ruta por el Cabril!... que sí, que ya sabemos que allí se encuentra un almacén de residuos radiactivos (de baja y media actividad, el único de España, ¡menos mal!), pero no porque se encuentre esa planta allí, y aunque puñetera la gracia que nos hace, no podemos dejar de visitar el entorno que la rodea, muy desconocido por parte de muchos, no así para gente que ya tiene una edad y que en sus años de juventud andaba trabajando en esta zona, en alguna de las muchas minas activas que exisían por aquí y que eran el motor de los pueblos de los alrededores y que también hicieron que se crearan pequeños poblados mineros hoy abandonados.
Lógicamente, para hacer la ruta prevista, trazada por nuestros compañeros de ASTOLL de Azuaga y que previamente estuvieron aquí para hacerla antes y buscar alternativas y zonas curiosas, había que pedir permiso a ENRESA (Empresa Nacional de Residuos Radiactivos, S.A., entidad pública sin ánimo de lucro, creada en 1984 por el Parlamento español, con la principal misión de proteger a las personas y al medio ambiente de los residuos radiactivos), como puede resultar obvio, por motivos de seguridad.
Tras pasar las barreras correspondientes, y un pequeño poblado minero a la izquierda, con las casas donde se alojaban los ingenieros de las explotaciones, bajamos del bus y comenzamos la ruta, y nada más bajar, comenzaba una larga subida, y es que esta ruta por la Sierra Albarrana, no tiene nada de llano, o subes o bajas, pero en un recorrido con unas vastas y bonitas vistas, de las que enganchan, y más en un día que amanece con los cerros de las sierras envueltos entre jirones de niebla, y que conforme avanza el día, en una mañana con más nubes que claros, desde las zonas más altas, podemos ver los valles con pequeñas zonas iluminadas al colarse los rayos de sol entre los huecos de las nubes...
Desde los puntos más altos, las vistas en un día como hoy, con los juegos de luces y sombras sobre un tapiz verde y ondulado, salpicados tan solo por un puñados de antiguas casas-cortijo, en un paraje cincelazo por los ríos Bembézar y Onza, y también por la mano del hombre, por las numerosas explotaciones mineras que hubo en toda esta zona que abarcamos con la vista, son maravillosas... no en vano, limita hacia el oeste con el Parque Natural de la Sierra de Hornachuelos, y es esta finca del Cabril, en la Sierra Albarrana, pertenece al término municipal de Hornachuelos (Córdoba).
La bajada hacia la presa sobre el río Bembézar, tambien nos deja unas vistas de las que se quedan clavadas en la retina, por no hablar del paso por la zona de las buitreras: en la primera de ellas, más de 50 buitres sobrevolaban prácticamente a nuestra altura, puro espećtaculo... más tranquilos algunos de ellos, los volveríamos a ver más adelante, posados sobre la roca tomando sus baños de sol en los ratitos que éste lucía....
La ruta es circular, aunque hay un tramo de ida y vuelta, el que se corresponde con la vista a la presa del río Bembézar, enclavado en un lugar donde el río se estrecha formando una pequeña garganta; lugar para fotos y un pequeño descanso.
A la vuelta pudimos ver algunos restos de explotaciones mineras, como los de un viejo polvorín, y después un paso estrecho entre cuevas de explotaciones mineras en los que en su exterior quedan retos de diversos minerales, aunque previamente, por si no teníamos bastane con el sube y baja, algunos subimos a otro mirador, también en un recorrido de ida y vuelta (kilómetro y poco de ida y otro tanto de vuelta), con la esperanza de poder ver el estrechaminto donde se encuentra la presa del Bembézar, la zona más encajonada, desde arriba, pero no fue posible, la maleza y el sotobosque que había arriba impidieron las vistas, no así las que teníamos desde allá arriba, de las plantas donde se almacenan los residuos radiactivos, al fondo, prácticamente las únicas construciones en este vasto y despoblado entorno.
A la vuelta, ENRESA nos dio una charla con audio-visual incluido, sobre la historia de este "almacén de residuos radiactivos", sobe las medidas de seguridad que se toman, sobre como funciona la recogida, transporte y almacenameinto del material radiactivo, así de cuál y como sería el futuro de estos cubos de hormigón, una vez que pasen los años y años que deben pasar hasta que esos isótopos radiactivos dejen de serlo, intentando que todo quede intengrado el entorno, cubierto de diferente capas de tierra, sobre los que se planten árboles y no quede visualmente ni rastro de ellos... y por último, en sus intalaciones nos ofrecieron un pequeño ágape... Todo muy ideal, todo muy controlado y todo lo que tu quieras.... pero que no pase nada grave, algo que no este previsto, porque entonces nos vamos al carajo, y más aún los que estmos en un radio de acción cercano...
En definitva una ruta interesante, y una zona bastante cercana y desconocida a pesar de su entorno natural: Parque Natural de Hornachuelos, Sierra de Córdoba y el Valle de Guadiato... Habrá que visitarlas más y conocerlas mejor...
Como siempre podéis ver éstas y otras fotos, a mayor resolución y tamaño, haciendo clic en ESTE ENLACE.
El TRACK base de la ruta, aunque al fnal acabamos haciendo un recorrido más extenso, de unos 14 km, frente a los poco más de 9 km del track, es el que podéis consultar/bajaros haciendo clic AQUÍ.
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