Después de estar esperando hasta última hora para ver si salía algún viaje interesante y puesto que una semana antes ya había descartado la posibilidad de realizar alguno de los dos viajes que me hubiera gustado hacer esta Semana Santa porque al final no se ha formado un grupo de gente suficiente como para amortizarlos (uno de ellos era realizar recorridos senderistas con raquetas de nieve por los Dolomitas italianos; y el otro un recorrido senderista circular por los valles y senderos del alto Atlas), al final tuve que montar estar ruta en un par de días, entre el viernes y el sábado y dejar el domingo para pertrechar a “Bucéfalo” (mi bici) y preparar el material a llevar, tanto documentación como equipaje.
Ya hacía tiempo que le tenía ganas a un recorrido por el Parque Natural de la Sierra de la Estrella (Portugal), pero necesitaba cinco días mínimo para realizar un trazado que me permitiera visitar la mayor parte de esta zona, con lo que no podía realizarla dentro de una de las típicas rutas navideñas que suelo hacer, porque al ir con otros compañeros, el número de días utilizados es de 3 o 4, y al ser una época en la que a las seis de la tarde es ya de noche, el kilometraje a realizar cada día es inferior, además de que en esta época la condiciones climatológicas en esta zona no serían las adecuadas. Por tanto, las únicas opciones serían realizarla o bien aprovechando unas vacaciones de Semana Santa o en verano, aunque en época estival suelo aprovechar para hacer alguna ruta de más días.
Por tanto, en esta Semana Santa en la que no habían salido adelante otros viajes que me motivaran más, y aprovechando que hasta esta semana habíamos estado gozando de un tiempo, en cuanto a climatología se refiere, inmejorable para la práctica del cicloturismo, e ideal para este recorrido por estas altas sierras siempre con temperaturas más frescas.
Pero la climatología es caprichosa, y después de disfrutar de un final de invierno que más bien parecía de primavera-verano, ahora, ya entrada la primavera, en la zona donde he estado ha reaparecido el invierno, y así todos los días han salido grises, totalmente cubiertos, con niebla, agua y frío, e incluso ha aparecido la nieve... ¡hay que joderse!...
Al final he podido realizar este recorrido y como disponía de más tiempo, he podido enlazarlo también con otro de un par de días visitando los castillos fronterizos, situados al noroeste y oeste de la Sierra de la Estrella, aunque como he comentado antes, no han sido las mejores condiciones para realizarlo, porque con el frío no he podido disfrutar a tope del recorrido cicloturista y en algunas largas bajadas hasta he llegado a sufrir, y eso que iba con ropa de invierno... por otro lado con la niebla y las nubes bajas no he podido disfrutar de muchas de las bonitas vistas con las que esperaba deleitarme, y tampoco he podido hacer muchas fotos dentro del ámbito de la Sierra, y para terminar, el último día, de principio a fin pedaleando con agua, y con temperaturas entre 7 y 8 grados.
De momento, os dejo aquí para el que tenga curiosidad, la documentación de la ruta y algunas de las fotos que he hecho, hasta que vaya escribiendo poco a poco las crónicas desde mi sillín, de esta ruta.
[Podéis ver la documentación de esta ruta, pinchando AQUÍ]
[Podéis ver las fotos de toda la ruta, pinchando AQUÍ]
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